La palabra salido proviene del participio pasado de salir y se utiliza en diferentes contextos.
Como adjetivo, describe algo que sobresale más de lo habitual, indicando una proyección o exceso en un cuerpo.
Además, en el ámbito de la zoología, se refiere a las hembras de ciertos animales durante su periodo de celo, un momento crucial en su ciclo reproductivo.
Por otro lado, salida se relaciona con el acto de salir o el lugar por donde se sale.