El término salín se refiere principalmente a un salero, un objeto utilizado para contener y servir sal.
Este utensilio es común en la mesa, facilitando el acceso a este condimento esencial en la cocina.
La palabra también puede evocar la idea de un lugar donde se extrae o produce sal, aunque su uso más frecuente se relaciona con el recipiente que acompaña nuestras comidas, resaltando la importancia de la sal en la gastronomía.