El término sallar se refiere a dos acciones principales.
En primer lugar, significa sachar, que implica el proceso de despojar o limpiar algo, generalmente relacionado con la agricultura.
En segundo lugar, se utiliza para describir la acción de tender grandes piezas de madera sobre polines, una práctica común en los almacenes para su conservación.
Ambas acepciones reflejan la importancia de la manipulación y el cuidado de materiales en diferentes contextos.