El término saturable se refiere a algo que tiene la capacidad de saturarse, es decir, de alcanzar un límite en el que ya no puede absorber más de una sustancia o energía.
Este concepto se aplica en diversos contextos, como en la química, donde una solución puede llegar a un punto de saturación, o en la electrónica, donde ciertos componentes pueden manejar solo una cantidad específica de corriente.
En definitiva, lo saturable implica un límite en la capacidad de absorción.