"Second row" es un término utilizado en rugby para referirse a los jugadores que ocupan las posiciones 4 y 5 en el equipo.
Estos jugadores forman parte de la segunda línea de defensa y desempeñan un papel crucial en el juego, tanto en ataque como en defensa.
Su posición estratégica les permite participar activamente en las fases de contacto y en la formación de scrums y line-outs, contribuyendo significativamente al rendimiento del equipo en el campo de juego.