La palabra secura se refiere a la sequedad, en su primera acepción, aunque es un término de poco uso en la actualidad.
Este concepto implica la ausencia de humedad o la condición de estar seco, aplicable a diversos contextos, desde el clima hasta la piel.
A pesar de su rareza en el lenguaje cotidiano, secura evoca una sensación de falta de agua o frescura, resaltando la importancia de la humedad en nuestra vida diaria.