Ejemplos de uso: "Ahora caminaba erguido, con la segureja en la mano derecha y el rostro tranquilo, un poco pálido, pero sin un temblor", El Santo y el demonio: novela - Página 257, Víctor Chamorro - 1964
"Con esfuerzo y ayuda de una afilada segureja , el alcalde logró desprender los cuernos firmemente empotrados en la caja craneal", Las batallas de Breda - Página 49, Eugenio Fuentes Pulido - 1990
"Cuando los niños se fueron, él cogió una segureja, y la pegó muchos golpes a su esposa en la cabeza", Una cala en la tradición oral extremeña, Fernando Flores del Manzano - 1995