El término sin fin se refiere a algo que no tiene un límite o que es infinito.
Esta expresión evoca la idea de lo innumerable, sugiriendo que no se puede contar o medir.
En diversas contextos, puede describir situaciones, emociones o conceptos que parecen extenderse eternamente, generando una sensación de ilimitación y continuidad.
Así, "sin fin" se convierte en una metáfora de lo eterno y lo inabarcable.