La situación activa se refiere al estado de un funcionario que está desempeñando efectivamente un servicio al Estado.
Este término implica que la persona no solo ocupa un cargo, sino que está involucrada en actividades que contribuyen al funcionamiento de la administración pública.
Comprender esta noción es esencial para analizar el papel de los funcionarios en el ámbito gubernamental y su impacto en la sociedad.