Soluble es un adjetivo que describe la capacidad de una sustancia para disolverse en un líquido.
En un sentido más amplio, también se refiere a la posibilidad de resolver un problema o error.
En el ámbito químico, se aplica a aquellas sustancias que pueden mezclarse con un solvente formando una solución homogénea.
La solubilidad depende de las propiedades físicas y químicas del soluto y del disolvente, así como de factores como la temperatura, la presión y la presencia de otros productos químicos en la mezcla.
Se mide mediante la concentración de saturación, donde agregar más soluto no aumenta la concentración y puede provocar la precipitación del exceso de sustancia.
Quím. Se dice de aquellas sustancias que pueden disolverse en algún líquido. La solubilidad es la propiedad de una sustancia química sólida, líquida o gaseosa llamada soluto que se disuelve en un solvente sólido, líquido o gaseoso.
La solubilidad de una sustancia depende fundamentalmente de las propiedades físicas y químicas del soluto y del disolvente, así como de la temperatura, la presión y la presencia de otros productos químicos (incluidos los cambios en el pH) de la solución.
El grado de solubilidad de una sustancia en un disolvente específico se mide como la concentración de saturación, donde la adición de más soluto no aumenta la concentración de la solución y comienza a precipitar la cantidad excesiva de soluto.
Muy a menudo, el disolvente es un líquido, que puede ser una sustancia pura o una mezcla. También se puede hablar de solución sólida, pero raramente de solución en un gas.
Etimología u origen de la palabra soluble: proviene del latín solubilis que significa "que se puede soltar".