El término soufflé, de origen francés, se refiere a un tipo de plato que se caracteriza por su consistencia esponjosa.
Este manjar se elabora en el horno, donde su mezcla, que puede incluir ingredientes como huevos y queso, se infla al cocinarse, creando una textura ligera y aireada.
El soufflé es apreciado tanto por su sabor como por su presentación, convirtiéndose en un símbolo de la alta cocina.