El término succino se refiere al ámbar, una resina fósil que presenta un color amarillo que varía en tonalidad, desde el más claro hasta el más oscuro.
Este material es conocido por ser ligero, duro y quebradizo, además de arder con facilidad y emitir un agradable olor.
Su uso abarca desde la fabricación de collares y boquillas para fumar hasta aplicaciones en la medicina, donde actúa como antiespasmódico.
m. Ámbar. [|| m. Resina fósil de color amarillo más o menos oscuro, opaca o semitransparente, muy ligera, dura y quebradiza, que arde fácilmente, con buen olor y se emplea en cuentas de collares, boquillas para fumar, etc. Muy electrizable por frotación. Se usa en medicina como antiespasmódico. ver: ambar]
Etimología u origen de la palabra succino: (latín succinum.)