La supresión es un mecanismo adaptativo en la psicología que permite manejar deseos, impulsos o ideas sin recurrir a la represión.
A través de esta estrategia de afrontamiento, las personas pueden controlar pensamientos o emociones que podrían resultar perturbadores, manteniéndolos a raya de manera consciente.
Este proceso es fundamental para el bienestar emocional, ya que ayuda a gestionar situaciones difíciles sin eliminar completamente los sentimientos involucrados.
Mecanismo adaptativo o estrategia de afrontamiento, en el cual deseos, impulsos o ideas son mantenidas a raya sin utilizar represión.
Origen etimológico de supresión: proviene de la palabra latina suppressio, y esta a su vez de supprimere, de sub- y premere, "presionar", del protoindoeuropeo (lengua madre de las lenguas indoeuropeas) *prem- (compárese el tocario B prām, "sujetar")