La palabra tarafana se refiere a una aduana o oficina encargada de recaudar los derechos de importación y exportación.
Este término, de origen germánico, evoca un espacio donde se gestionan las regulaciones comerciales y se controlan las mercancías que cruzan fronteras.
La tarafana juega un papel crucial en el comercio internacional, asegurando que se cumplan las normativas fiscales y aduaneras.