El término tardinero y su forma femenina tardinera se utilizan para describir a alguien que es tardo o lento en sus acciones.
Estas palabras evocan una sensación de pereza o falta de prisa al realizar tareas, sugiriendo un comportamiento que puede ser percibido como poco diligente.
En contextos cotidianos, referirse a alguien como tardinero implica una crítica a su ritmo de trabajo o a su disposición para actuar.