Tardísimo es un adverbio que se utiliza para indicar que algo ocurre en un momento muy avanzado en relación al tiempo esperado o convencional. Se emplea para señalar que algo se hizo en un tiempo excesivamente demorado o pasada la hora estimada. Esta palabra es especialmente útil para marcar un grado extremo de retraso o demora en una actividad o suceso.
En algunas situaciones, el adverbio tardísimo puede utilizarse de manera irónica para señalar que algo se hizo en un momento inadecuado o inoportuno, resaltando el desacierto en la elección del momento para llevar a cabo cierta acción. También puede emplearse de forma descriptiva, destacando la excepcionalidad y rareza de que algo ocurra tan tarde.
Asimismo, el uso de tardísimo puede estar asociado a la sensación de sorpresa o asombro por el retraso inusual de un acontecimiento, enfatizando la anomalía de que algo ocurra en el momento en que sucede. En esta forma de uso, el adverbio puede transmitir un matiz de incredulidad o extrañeza ante la tardanza extrema de aquello a lo que se refiere.
Ejemplos de uso: "Llegó a la fiesta tardísimo, cuando todos ya se estaban yendo"
"La película empezó tardísimo; muchos se quedaron dormidos en el cine"
"Me llamó tardísimo para disculparse, pero ya era demasiado tarde"
"¡Es tardísimo para pedir disculpas, deberías haberlo hecho antes!"
Etimología u origen de la palabra tardísimo: del superlativo de tarde.