El término temperatísimo y su forma femenina temperatísima se utilizan para describir algo que es extremadamente templado, moderado o parco.
Estas palabras sugieren un estado de equilibrio y mesura, donde las características de lo que se describe no son ni excesivas ni escasas, sino que se encuentran en un punto ideal.
Su uso puede aplicarse a diversas situaciones, desde el clima hasta comportamientos o actitudes.