La tenacidad es la cualidad de ser tenaz, es decir, de tener persistencia, constancia y determinación en la consecución de un objetivo o en la realización de una tarea.
Una persona tenaz es aquella que no se rinde fácilmente ante los obstáculos o dificultades, y que muestra una gran resistencia y perseverancia para alcanzar sus metas.
La palabra "tenacidad" es un sustantivo femenino que se refiere a la cualidad de ser tenaz, es decir, de tener persistencia, constancia y determinación en la consecución de un objetivo o en la realización de una tarea.
Una persona tenaz es aquella que no se rinde fácilmente ante los obstáculos o dificultades, y que muestra una gran resistencia y perseverancia para alcanzar sus metas.
La tenacidad implica una actitud de no rendirse, de seguir adelante a pesar de los contratiempos y de mantenerse firme en la búsqueda de lo que se desea.
Ejemplos de uso: "La tenacidad de este atleta le permitió superar todos los obstáculos y lograr la medalla de oro".
"A pesar de las dificultades que enfrentamos, su tenacidad nos inspira a seguir adelante".
"La tenacidad de este estudiante es admirable, no se rinde hasta haber alcanzado sus metas académicas".
"Necesito más tenacidad para enfrentar los desafíos que se presentan en mi trabajo".
"La tenacidad de este equipo de fútbol les ha permitido llegar a la final del campeonato".
"Me impresiona la tenacidad con la que mi madre sigue luchando contra su enfermedad".
Origen etimológico de tenacidad: proviene de tenaz y con el sufijo -idad, y este a su vez de la palabra latina tenax
Segundo diccionario: tenacidad
Origen de la palabra: (latín tenacitas, -átis.)
f. Calidad de tenaz.
Fís. Propiedad de la materia en virtud de la cual los cuerpos presentan una mayor o menor resistencia a la fractura por tracción.