La tensión gaseosa se refiere a la elasticidad de los gases, es decir, su capacidad para expandirse y ocupar el espacio disponible.
Este fenómeno es fundamental en la física, ya que explica cómo los gases se comportan bajo diferentes condiciones de presión y temperatura.
La tensión en este contexto refleja la fuerza que los gases ejercen en las paredes del recipiente que los contiene, influyendo en su comportamiento y propiedades.