El término terruzo hace referencia a un concepto antiguo que se relaciona con el terruño, es decir, un trozo o fragmento de tierra.
Aunque su uso ha caído en desuso, esta palabra evoca la conexión con el suelo y la naturaleza.
En su acepción más simple, un terruzo puede ser visto como un pequeño terroncito que representa la esencia del terreno, recordándonos la importancia de la tierra en nuestras vidas.