La palabra tocha tiene varias acepciones, pero en México se utiliza principalmente para referirse a una mujer desaliñada.
Este término evoca una imagen de descuido en la apariencia personal, reflejando una falta de atención a la presentación.
Aunque su uso puede variar en diferentes contextos, en esta región se asocia con un estilo de vida más relajado o despreocupado en cuanto a la estética.