El término todito se utiliza como un adjetivo que se refiere a la idea de todo, pero con un matiz especial.
En su uso más común, implica una connotación de completud o totalidad, sugiriendo que se abarca cada parte o aspecto.
Además, en el lenguaje familiar, todito intensifica el significado de todo, añadiendo un toque de cariño o énfasis, lo que lo convierte en una expresión más afectuosa y cercana.