El tojal es un terreno cubierto principalmente por la planta espinosa llamada tojo, perteneciente a la familia de las fabáceas y conocida científicamente como Ulex.
Este tipo de terreno se encuentra comúnmente en regiones con climas específicos, como áreas montañosas o zonas de matorral, donde las condiciones climáticas y del suelo favorecen el crecimiento de estas plantas resistentes y poco exigentes en nutrientes.
El tojal, característico de ciertas regiones con climas específicos, es un espacio natural donde predomina la presencia del tojo, una planta espinosa de la familia de las fabáceas, conocida científicamente como Ulex.
Estos terrenos suelen encontrarse en áreas de montaña o en zonas de matorral donde el clima y el suelo favorecen el crecimiento de estas especies resistentes y poco exigentes en cuanto a nutrientes.
Los tojales son ecosistemas importantes por varias razones. En primer lugar, actúan como refugio para diversas especies de fauna, especialmente aves y pequeños mamíferos, que encuentran en estos espacios protección y alimento.
Además, los tojos, gracias a sus raíces profundas, desempeñan un papel crucial en la prevención de la erosión del suelo, contribuyendo así a la conservación del paisaje y al mantenimiento de la salud ambiental de la región.