La palabra tolinga se utiliza en México para referirse a la muerte, un concepto que representa la cesación o el término de la vida.
En este contexto, la tolinga evoca reflexiones sobre la existencia y el ciclo vital, siendo una expresión cultural que refleja la forma en que se aborda el final de la vida en la sociedad mexicana.
Su uso puede variar en diferentes regiones, pero siempre mantiene su conexión con el tema de la mortalidad.