La traducibilidad se refiere a la capacidad de un texto o contenido para ser traducido de un idioma a otro sin perder su significado original.
Esta cualidad es fundamental en el ámbito de la traducción, ya que determina si un mensaje puede ser comprendido en diferentes contextos culturales y lingüísticos.
La traducibilidad no solo implica la conversión de palabras, sino también la preservación de matices y emociones.