El término traído y su forma femenina traída provienen del participio pasado del verbo traer.
Se utilizan para describir algo que ha sido transportado o llevado de un lugar a otro.
Además, en un contexto más coloquial, pueden referirse a objetos que están usados o gastados, como en el caso de la ropa traída, que sugiere prendas que han tenido un uso previo.