La translucidez es la propiedad de ciertos materiales que permite el paso de la luz, pero sin que se puedan ver claramente los objetos a través de ellos.
A diferencia de los materiales transparentes, que permiten una visión nítida, los translúcidos difuminan las imágenes, creando un efecto suave y sutil.
Esta cualidad es apreciada en diversas aplicaciones, como en la decoración y el diseño, donde se busca un equilibrio entre luz y privacidad.