El término tribular proviene de una acepción antigua que se relaciona con el verbo atribular, y se utiliza para describir la acción de causar tribulación o sufrimiento.
Aunque hoy en día su uso es poco común y se considera en desuso, su significado evoca la idea de provocar angustia o inquietud en alguien.
Así, tribular refleja un estado de malestar emocional que puede afectar profundamente a las personas.