El término trullar tiene dos acepciones principales en el contexto del español de Palencia.
En su primera acepción, se refiere a la acción de enlucir una pared con barro, un proceso que embellece y protege las superficies.
En su segunda acepción, se utiliza de manera figurada para describir el acto de embadurnar, es decir, aplicar una sustancia de forma desordenada o excesiva.
Ambas definiciones reflejan el uso local y particular de esta palabra.