La turbera es un lugar específico donde se encuentra la turba, un material orgánico que se forma por la descomposición de plantas en ambientes húmedos y ácidos.
Este tipo de ecosistema es fundamental para la conservación del agua y la biodiversidad, ya que actúa como un importante regulador del clima y hábitat para diversas especies.
Las turberas son esenciales en la lucha contra el cambio climático debido a su capacidad de almacenar carbono.