El término ventorro se refiere a una venta de hospedaje que es pequeña o de mala calidad.
Su uso es generalmente despectivo, lo que implica que se considera un lugar poco acogedor o incómodo para los viajeros.
Este tipo de establecimiento suele evocar imágenes de condiciones precarias y un servicio deficiente, lo que contribuye a su connotación negativa en el lenguaje cotidiano.