El término vivace proviene del ámbito de la música y se utiliza para describir un movimiento que es más rápido que el alegro, pero menos veloz que el presto.
Esta palabra sugiere una sensación de vitalidad y dinamismo en la interpretación musical, invitando a los intérpretes a ejecutar las notas con energía y entusiasmo.
Así, el vivace se convierte en una expresión de alegría y movimiento en las composiciones.