Xión es un sufijo que se utiliza para indicar una acción, proceso o efecto.
En el antiguo lenguaje de la germanía, era utilizado como un sí.
Se añade a palabras que tienen en su familia léxica un término que termina en -jo o -xo, como en complexión (complejo), conexión (conexo), crucifixión (crucifijo), flexión (flexo, reflejo) y fluxión (flujo).
Aquellas palabras que contienen en su familia léxica un término acabado en -jo o -xo, se escriben con este sufijo: complexión (complejo), conexión (conexo), crucifixión (crucifijo), flexión (flexo, reflejo), fluxión (flujo).