El término zabullidor y su forma femenina zabullidora se refieren a aquellos que zambullen o se zambullen en el agua.
Estas palabras evocan la acción de sumergirse de manera rápida y enérgica, ya sea en un contexto recreativo o en actividades acuáticas.
Su uso resalta la energía y la dinámica de quienes disfrutan de la inmersión en el agua, convirtiéndolos en protagonistas de momentos de diversión y aventura.