La palabra zapa tiene varias acepciones que abarcan desde herramientas hasta texturas.
En el ámbito de la construcción, se refiere a una pala con un corte acerado utilizada por los zapadores.
También designa una excavación subterránea o al aire libre.
En el contexto de materiales, se relaciona con la piel áspera de ciertos selacios y con la piel labrada que imita el grano de la lija, así como con una labor en obras de metal que reproduce esta textura.