La palabra zurba se refiere a un fruto específico conocido como serba, que proviene del serbal.
Este fruto tiene una forma similar a la de una pera pequeña y se caracteriza por su color encarnado amarillento.
La zurba es un ejemplo de la rica diversidad de frutos que nos ofrece la naturaleza, destacándose no solo por su apariencia, sino también por su conexión con el entorno en el que crece.