• « Hace varios años, Dorothy Gardener, que tenía 38 años y era correctora de una editorial, empezó a notar que se le enfriaban las manos y le aparecían manchas rojas en la piel; también sentía intensos ardores en el estómago, acompañados de agruras. »
• « Su internista, que no creía indispensable someterla a la cirugía, la remitió a otro especialista, el cual resolvió el enigma: Dorothy padecía esclerodermia, o endurecimiento de la piel, enfermedad que causa muchos trastornos, inclusive agruras y ardores, consecuencias del mal funcionamiento del esófago. »