• « Después del verano las uñas aparecen algo más sensibilizadas que en otras épocas del año. El salitre del agua del mar, el cloro de las piscinas, la arena, el viento... y muchas cosas más influyen de forma negativa y contribuyen a que se deshojen, perdiendo fortaleza y en el peor de los casos a que se doblen y corten fácilmente. »