• « Si bien los hombres antiguos la chispa la lograban con el frote de las varillas, Champion descubrió que esta operación se realizaba sobre una yesca fácilmente inflamable que provenía de las cortezas del abedul o el álamo. Según este investigador, en la prehistoria se podía utilizar un salitre natural extraído de los pozos negros y de los estercoleros. »