Cuarenta oraciones con la palabra «negro» y derivadas (por ejemplo: negra, negras, negros) seleccionadas de refranes, poesías, cuentos y artículos de interés general.
Las siguientes oraciones fueron seleccionadas por ser oraciones cortas, por su sencillez o porque están orientadas a escolares; así pueden ser entendidas por niños y adolescentes.
• « Las mujeres saudíes tienen prohibido salir a la calle con el cabello descubierto. Además visten la abaya, un manto negro que les cubre hasta los pies. »
• « Oscureció con rímel la barba rubia de Mark Lijek, y ayudó a Kathleen Stafford a recogerse en la nuca su largo cabello negro, y le dio unas gafas de montura gruesa. »
• « A principios de los años veintes había más de 5000 empleados dé raza negra en la Ford, y en 1926 su número se había duplicado: constituían el diez por ciento de toda su fuerza laboral. »
• « Morrones en juliana y chorizos colorados en rodajas finas, espolvoreó con abundante pimienta negra, y batió unos huevos frescos con un poco de crema de leche, con lo que cubrió el relleno. »
• « Este fue un enorme cambio demográfico en muy poco tiempo que tuvo consecuencias duraderas para la sociedad europea, gracias sobre todo a la escasez de mano de obra que introdujo la peste negra. »
• « Primero aparecen las algas y los hongos, que relucen contra la piedra negra a la luz del sol poniente. Estos organismos descomponen la piedra y preparan el suelo para otras plantas más exigentes. »
• « Para acompañarlo se prepara una salsa con cebolla rehogada en aceite de oliva y manteca, extracto de carne, la, pimienta negra, mostaza, el resto del paté, tomillo y vino tinto; reducir y espesar. »
• « En muchos países como los Estados Unidos, Inglaterra, Bélgica y Alemania se ha llegado a formar una capa espesa y negra, al unirse el humo con la niebla. Es el llamado smog, de alto efecto tóxico. »
• « Mi hijo mayor, Rafael, de 20 años, había pedido permiso para ausentarse de la universidad a fin de estar con sus seres queridos: su hermano Diego, de 13 años, mi esposa, Dorothy, y nuestro pequeño perro negro, Santos. »