• « Mientras el alumno pueda estudiar o no estudiar, comportarse correcta o incorrectamente; mientras el profesor pueda ser puntual o no, llenar planillas o no, dar la clase correspondiente o no darla, cada uno de los sectores escolares estará en posesión de una cuota de poder. Ese poder está basado en la existencia de la incertidumbre, a pesar de las reglas que pretendan disimularla aumentando la previsibilidad de las conductas. En mayor o menor grado, la persona de la que se necesita una respuesta positiva posee una cuota de poder. »