• « ¡Qué humo negro, denso y fétido! Arde como un horno: el calor se extiende por la habitación y casi nos deja sin aliento. Nos apresuramos a abrir la ventana para que el aire exterior pueda purificar el aire viciado de los gases carbónicos. ¿Qué? ¿El carbón también contiene este gas? Sí, porque también es un carbón. »